jueves, 28 de junio de 2012


¿Me viste llegar?
¿Viste como me iba acercando?

Vi como el manto de la noche lo iba cubriendo todo con timidez.
No queriendo hacerse visible
y así no molestar a las peticiones de los asistentes que, inmersos en sus pensamientos,
anhelan, desean y piden como niños a sus padres
sus caprichos, sus necesidades.



¿Serán concedidos?

Un anhelo que dura un año.

Reunidos a la luz y el calor de la lumbre,
sumidos en un círculo de amor,
alzan sus preces al cielo,
al viento, a los árboles,
a todo ser animado e inanimado,
al cosmos..., a los dioses.

Suena el crujir de las ramas de los árboles,
allí atrás,
a un lado y a otro del claro del bosque.

Unidas las manos expresan sus deseos
para todos..., el bien para todos.

Una ráfaga de viento,
una antorcha que se apaga,
un animal que suena a lo lejos..., el silencio,
sumidos en el silencio y en la comunión.

En muchas ocasiones suceden cosas a los demás que nos hubiese gustado poder contar en primera persona.
Este es el caso, no me sucedió a mí, pero lo viví tal cual lo cuento. 

Son las cinco de la tarde y espero a una de mis niñas, B. Esta tarde tenía una fiesta de la catequesis y me temo, que con la fuerte personalidad que tiene, "trabajosa" que decimos por aquí, va a venir bien tarde, ya que ayer tuvimos pelea porque no quería venir..., era evidente, prefería la fiesta a estudiar. 


Suena el timbre del portero automático: 

 -¿Quién es?

- Soy B.

Abro y oigo no solo los pasos por la escalera, sino una respiración fatigada y entrecortada. 
Entra y, me asusto y todo el verla:

-¡Pero B, qué te pasa! ¡Estás colorada como un tomate! 

- ¡Ay, no sé Pili! Creí que no llegaba nunca!

- ¿Pero es que has venido corriendo?

- ¡No, que va! ¡Si no podía! Es la mochila que pesa mucho.

- ¿Pero qué llevas? 

- No sé, si yo cuando salí de mi casa no pesaba tanto.

- Bueno, vamos a mirar dentro a ver que pasa.

Abre la mochila, y con gran asombro empieza a sacar de ella cada pedrusco como los megalitos de Stonehenge, al menos cuatro venían.

¡¡¡¡¿¿¿¿PERO QUÉ ES ESOOOOOO????!!!!

¡¡¡¡LA MOCHILA LLENA DE PIEDRAAAASSSS!!!!

Las carcajadas recorrían cada milímetro de mi cuerpo para finalmente salir a borbotones por mi boca.

-¡Ay Pili no te ríassssssss!!!! Han sido mis compañeros de la catequesis, qué mala........

Y es que no hay nada igual a los niños,
ni a la infancia,
tan inocente,
tan espontánea,
tan fresca...
... ¡tan pérfida!

miércoles, 13 de junio de 2012

Tonterías tontas

Llevamos dos días en nuestro primer piso de alquiler.
Es todo tan nuevo, tan "ilusionante" (y eso que no se trata de fútbol).
El piso es viejo, cutre, y hasta que llegamos nosotras, sucio.
Pero no importa, nada de eso importa,
porque nos acabamos de "semiemancipar".
Somos universitarias, mayores de edad,
inteligentes, importantes... ¡libreeeeessssss!

Nuestra primera cena en el piso,
la noche anterior decidimos salir fuera,
nuestras primeras cañitas en el bar de abajo:
"la ballena alegre".

¿Y por qué no hacer esto mucho más divertido?

Si colocamos una mantita de flores en el suelo,
y colocamos en platos lo que será una cena frugal,
si ponemos música, colocamos nuestros peluches alrededor
y nos sentamos en el suelo felices a cenar...¿qué será lo que tendremos?

¡Un picnic fenomenal!

Sentadas sobre flores, con los animalitos alrededor,
escuchando los pajaritos (escogidos para la ocasión) cantar.