Estamos acostumbrados, por regla general, a sentir vergüenza por nuestros sentimientos. Y así vivimos de forma artificial, dando la espalda a lo único que poseemos genuino y propio, lo que nos define a cada uno de nosotros y nos hace ser como somos.
Dicen que la primavera la sangre altera, y cosas así. Quizás es que la explosión de vida que rodea todo alrededor, nos incita a sacar de dentro el brillo y la luz que se quedan escondidos y atemorizados, en algún rincón del corazón, con la tristeza del invierno, cuando todo queda agazapado.
Explosión de vida, de ideas y de ganas. De ganas de vivir antes que la oscuridad lo cubra todo de nuevo. No, no voy a repudiar el sentimiento romántico. Más bien, deseo airearlo, mimarlo y acunarlo, sentirlo y dejarme llevar por él. Hace tiempo que la alegría entró en mi casa, allá por finales de marzo, y desde entonces no ha dejado mi corazón de palpitar al ritmo de una canción de amor. No sé si vendrá o simplemente se disipará con la llegada del otoño, como tantas otras veces en la historia de mi vida, pero tan solo rememorar cómo es el comienzo de una historia de amor llena los días de una manera que, sinceramente, tengo que reconocer, ya había olvidado.
Por naturaleza la raza humana tiene siempre vergüenza de mostrar sus sentimientos es un craso error como bien dices, por mi parte mi corazón no entiende de estaciones, me gusta el invierno, lo disfruto de forma enorme, la sensación de calor, los días cortos en los que me encierro en mis pensamientos y en mis sentimientos y los aireo vaya que si los aireo, pero también disfruto de un gran paseo en otoño con esos colores ocre, en los que aunque parece que la naturaleza languidece son momentos para la charla, los besos bajo un árbol, en invierno son los besos robados en la oscuridad y el frío, que te hacen entrar en calor, la primavera con su colorido, su brotar, su explosión de júbilo, como lo expresa Vivaldi, el verano me hace sentir triste, no soporto el calor, cuando puedas escucha de Bubble You and I....da igual la estación, si el amor entra déjalo quedarse, en invierno si eres friolera te dará calor, en otoño podrás pasear bajo la lluvia y reírte de tu ropa mojada....que ya te ayudará a secar (de alguna forma)....
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